El cambio de género se podrá llevar a cabo a partir de los 12 años con autorización judicial, de los 14 con la autorización de padres o tutores o de los 16 sin ninguna condición.
La medida más relevante es que cualquier persona podrá autodeterminar su género sin necesidad de informes médicos o psicológicos. Sin embargo, la nueva legislación recoge otros muchos cambios.